Skip to content

Cualidades del concreto celular para la construcción sustentable

En la búsqueda de soluciones para construcciones más sostenibles y respetuosas con el medio ambiente, el concreto celular ha surgido como una opción prometedora. El concreto celular es un material innovador que combina propiedades mecánicas sólidas con una menor huella ambiental en comparación con los métodos de construcción tradicionales. En este artículo, exploraremos las cualidades únicas del concreto celular que lo convierten en una seria recomendación para la construcción de casas pasivas y edificios sustentables.

Para la fabricación del concreto celular requiere de una menor cantidad de cemento en comparación con el concreto convencional por lo que es más eficiente en el uso de este recurso. Además, incorpora aire en su mezcla, lo que reduce la cantidad total de material necesario para llenar un determinado volumen. Esto no solo disminuye la cantidad de materias primas requeridas, sino que también reduce las emisiones de dióxido de carbono asociadas con la producción de cemento.

Aislamiento térmico y acústico

El concreto celular es conocido por su excelente capacidad de aislamiento térmico y acústico debido a su estructura celular interna dada por las burbujas de aire encapsuladas en la mezcla que otorga a este material propiedades aislantes superiores al concreto convencional. Esto deriva en una menor demanda de energía para la climatización del interior de los edificios que en combinación con otros elementos integrados a la envolvente que han probado su eficiencia térmica puede llegar a desaparecer como es el objetivo final de la construcción de casas pasivas. Además, el aislamiento acústico proporcionado por el concreto celular contribuye a crear un ambiente interior más tranquilo, cómodo y relajado alineado con el concepto de Neuroarquitectura.

Características estructurales

El concreto celular es notablemente más ligero que el concreto convencional debido a su estructura de células llenas de aire. Esta característica conlleva ventajas significativas en términos de reducción de la carga en los cimientos y estructuras, lo que puede simplificar el diseño estructural y reducir la cantidad de materiales requeridos. Además, su bajo peso facilita el transporte y la manipulación de los elementos prefabricados de concreto celular, lo que a su vez puede reducir el consumo de combustibles fósiles asociados con el transporte que valora entre otras cosas la certificación LEED®.

A pesar de su estructura celular, este tipo de concreto no sacrifica la durabilidad ni la resistencia. A menudo es capaz de soportar cargas comparables a las del concreto convencional. Su baja conductividad térmica también ayuda a prevenir la formación de fisuras debido a cambios bruscos de temperatura. Esto se traduce en una vida útil más larga para las estructuras construidas con concreto celular, lo que a su vez reduce la necesidad de renovaciones y reparaciones frecuentes.

En definitiva, el concreto celular nos ofrece una combinación única de cualidades que lo convierten en un material valioso para la construcción sustentable. Su eficiencia en el uso de recursos, su capacidad de aislamiento, su bajo de peso y su durabilidad son características que pueden contribuir significativamente a la reducción del impacto ambiental de la industria de la construcción. 

A medida que avanzamos hacia prácticas constructivas más sostenibles, el concreto celular se presenta como una opción prometedora para edificios más eficientes y resistentes en el futuro.

Colaboración: Amevec

Comparte este artículo:
Artículo publicado en
Edición 43
Edición 43

Contenido de esta edición

Editorial - El impacto del sector de la ventana en la construcción sustentable
Fachadas inteligentes, un aliado del diseño arquitectónico sostenible
Consultoría de fachadas, alineada a la construcción sustentable
"Integrated Design" y cómo lograr un proyecto sostenible
Sustentabilidad y domótica: ahorro de energía en la casa inteligente
Ventanas eficientes para una construcción sustentable
Neuroarquitectura
La madera, el origen de las fachadas ventiladas
Jardines verticales
Vidrios ignífugos