Cambio climatico, 30 años para procurar salvar a la humanidad de consecuencias muy superiores
Los temas que les propongo evaluar son muy complejos, lamentables y mucho, mucho se ha vivido, escrito, sin resultados importantes a corto y mediano plazo a nivel local, regional y mundial. Procuraré ser muy conciso y enviar un mensaje de alerta que despierte la conciencia a nuestra industria del cerramiento, inmobiliaria y construcción en general.
La dramática pandemia del COVID-19 nos ha afectado a nivel global. A la fecha de escribir este artículo tenemos aproximadamente 109 millones de contagiados, 2.4 millones de personas fallecidas en todo el mundo. En el ámbito económico la OIT publicó en 2020 que la proyección de pérdida de empleos estaría entre 13 a 36 millones de puestos, con una media de 25 millones. En términos de crecimiento del PIB se planeaba una disminución del 8 %. Las cifras reales resultan superiores. A partir de las fiestas navideñas de 2020 se registró un incremento en las negativas cifras.
La crisis que vivimos hoy por COVID-19 nos ha enseñado lo vulnerable que somos, cuanto debemos modificar. Pero es solo la antesala de lo que puede llegar a suceder en los próximos años y de forma irreversible para la raza humana.
La población mundial lleva décadas oyendo hablar sobre el “CAMBIO CLIMATICO”, los políticos, organizaciones internacionales y los mercados han generado convenios, acuerdos de bajo impacto real.
De acuerdo con el Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático de la ONU (IPPC) en su informe especial presentado en 2018 planteó:
– El crecimiento del calentamiento global en el decenio 2006 – 2015 fue de hasta + 1.0 °C. En algunas regiones y estaciones del año se registra incrementos muy superiores. Pudiendo alcanzar el doble y el triple. Estos sobre efectos se registran particularmente en el Ártico.
– Manteniendo las tendencias de crecimiento, el calentamiento global entre 2030 a 2052 se acuerda limitar a un crecimiento de + 1.5 °C respecto a los niveles preindustriales (período entre 1850 y 1900).
– Limitar la meta de aumento del calentamiento global hasta + 1.5 °C (1) para 2052, requiere de acciones rápidas. Estamos hablando de solo 30 años, que en materia de mantenimiento de la humanidad es muy poco tiempo.
– Es improbable que las emisiones antropógenas (considerando los gases de efecto invernadero, los aerosoles y sus precursores) causen un calentamiento superior a 0,5 °C durante los próximos dos o tres decenios (nivel de confianza alto) o en una escala temporal de un siglo (nivel de confianza medio). Sin embargo, en escalas de tiempo multidecenales se detendría “si se alcanzaran y mantuvieran emisiones antropógenas globales netas de CO2 iguales a “CERO”.
Alcanzar “CERO EMISIONES DE CO2 y la cuota de incremento de calentamiento global a + 1.5 °C (1) para 2052” es un “reto colosal a nivel global” para científicos, I + D del sector empresarial. Se trata de continuar desarrollando nuevas fuentes de creación de energías limpias. Y en todos los ámbitos, perfeccionar las tecnologías que maximicen el ahorro energético.
No obstante, a estos impresionantes esfuerzos por alcanzar en los siguientes “30 años”. La evidencia sustenta que no alcanzar las metas de cuantía y plazo de tiempo, traerá consigo cambios detectables en fenómenos extremos: el incremento de las temperaturas extremas en muchas regiones, el aumento de la frecuencia, la intensidad o la cantidad de las precipitaciones y sequías intensas en varias regiones, aumento de la frecuencia e intensidad de huracanes. Aumento del nivel del mar, poniendo en riesgo a poblaciones y ecosistemas vulnerables. Perdidas en la producción de alimentos, seguridad alimentaria, suministro de agua, seguridad humana, crecimiento económico, aumento en varios cientos de millones el número de personas expuestas a los riesgos relacionados con el clima y susceptibles de caer en la pobreza.
Entonces debemos comprender que:
– Alcanzar en 30 años el reto planteado no es un panorama alentador, pero si inevitablemente necesario.
– 30 años es un tiempo de reacción muy corto. Ya hemos perdido muchas oportunidades.
¿Cuál debe ser el aporte de la industria inmobiliaria, de la construcción y del cerramiento ante estos retos?
En la construcción y los edificios se consumen como media el 40 % de la energía que generamos a nivel global (México, 18 %). Es un valor significativo. Debemos cambiar con responsabilidad los métodos de proyección, que nos conduzcan al uso de productos energéticamente más eficientes, con otras propiedades añadidas que incentive el uso en la construcción moderna más ampliada.
La envolvente de los edificios son las barreras que nos aíslan y protegen del exterior. Los elementos transparentes en las ciudades modernas son un auténtico monumento al vidrio. Y son estas las llamadas a ahorrar y generar energía, bien administrada en nuestros inmuebles.
En materia de envolvente acristalada, paradójicamente a toda la situación y riesgo medioambiental de las últimas décadas. A nivel sociedad se ha venido visualizando de forma irresponsable, como: eso no va a ocurrir, eso no me va a tocar. Existen productos de alto impacto energético para la edificación con una existencia y evolución constante desde hace 60 años. Pero que los mercados especulativos, en todas direcciones, no han favorecido su prudente y oportuno empleo.
Debemos considerar que el primer paso de aporte a la meta de “CERO EMISIONES DE CO2 y la cuota de incremento de calentamiento global a + 1.5 °C (1) para 2052” para nuestras industrias es ahorrar, no despilfarrar más energía en nuestras edificaciones. Para ello, utilizar de forma expedita las tecnologías energéticamente eficientes. Y hacer procesos constructivos que respondan a las globales y auto conservativas necesidades que nos toca, son tareas que debimos emprender conscientemente hace más de 20 años. “Nos quedan 30 años”.
Contamos en la industria del cerramiento con una amplia gama de productos eficientes, ahorradores de energía. Entre los cuales podemos mencionar desarrollados sistemas de ventanas de PVC, aluminio de rotura de puente térmico, amplia gama de vidrios de última generación.
Componentes de la envolvente con la capacidad de generar energía y administrar la misma. Protecciones solares arquitectónicas y físicas que minimicen el intercambio de la envolvente. Posibilidad de calentamiento de agua mediante fuentes de energía limpias, soluciones de intercambio de aire que minimicen el uso de equipos de climatización.
Desde nuestras organizaciones, asociaciones o gremios empresariales estimular a los gobernantes a legislar e incentivar de forma efectiva el uso de estos productos.
¿Qué vamos a exponerles a los jóvenes del 2052? Van a ser tan cercanos a nosotros mismos. Serán nietos e hijos, nuestra descendencia en primera o segunda línea. Son solo 30 años.
Nosotros desde Grüne, no especulamos.
Ofrecemos nuestros productos eficientes a precios competitivos, incluso respecto a esos que no debería existir en el mercado.
Esos serán nuestros argumentos, hicimos responsablemente lo necesario en nuestro tiempo.
(1) El incremento de + 1.5 °C es respecto a los niveles preindustriales (período entre 1850 y 1900)
Publireportaje: Grüne