El PVC gracias a su propiedad de baja conducción térmica es un aislante natural cuyos niveles de aislamiento son superiores a otros materiales y por su puesto a los del aluminio con o sin rotura de puente térmico. La instalación de cancelería de PVC junto con un vidrio adecuado puede suponer un ahorro en el consumo de energía de una vivienda de hasta un 70%.
Ciclo de vida del producto y reciclaje
Las ventanas de PVC tienen una vida útil de más de 50 años. Al desecharlas, más del 95% se recicla y reincorpora al proceso productivo. El PVC de ventanas antiguas con perfiles Kömmerling, al igual que el PVC procedente de los restos de producción y de recorte, constituye una materia prima apreciada, equivalente al PVC recién elaborado.
Elegir y comprar ventanas es una decisión importante, sobre todo si tenemos en cuenta que la vida útil de los cerramientos supera los cincuenta años. Su durabilidad hace que se conviertan en uno de los elementos más importantes del hogar, y más teniendo en cuenta que son responsables de cerca del 30% de las pérdidas energéticas de la vivienda.
Las ventanas y puertas deben proporcionar un elevado nivel de aislamiento y eficiencia energética, ya que esto repercutirá directamente tanto en nuestras facturas de energía, como en la salud y el confort de los habitantes del hogar.
A continuación se explican las diferentes características que son muy importantes conocer para definir una ventana de calidad y que ofrezca capacidades aislantes que contribuyan al ahorro energético. Características que vienen marcadas por el material escogido para los sistemas de perfiles y el tipo de vidrio, y que, además, influyen en la calidad de la ventana.
Aislamiento térmico
Mide el intercambio de energía entre el interior y el exterior de la vivienda, por lo que cuanto mayor sea el aislamiento que proporcione la ventana, mayor será el confort que aporte a la vivienda. El aislamiento térmico viene marcado por el valor Uw, y se calcula teniendo en cuenta el valor Uf del perfil y el valor Ug del vidrio. ¿Cómo interpretamos este valor? Cuanto más bajo sea, mayor será el aislamiento de la ventana.
Con un valor Uw 1,5 W/m2K se optimiza el gasto energético y se puede reducir la demanda de energía hasta un 32%. Con este nivel de transmitancia, la ventana mantiene siempre una temperatura agradable al tacto y se minimiza el riesgo de condensaciones.
Aislamiento acústico
Este es un valor expresado en decibelios (dB). Este número de decibelios es la cantidad de ruido que consigue reducir esa ventana. Cuanto mayor sea este valor, mayor será el aislamiento acústico.
En zona de ruido normal o moderado una ventana con vidrio estándar debe alcanzar como mínimo los 30dB de reducción acústica, mientras que, en zonas con nivel de ruido elevado, se debe incluir vidrios con propiedades acústicas y exigir reducciones por encima de los 40dB.
Permeabilidad al aire
Mide la cantidad de aire que pasa por una ventana cerrada. La norma EN 1026 establece cuatro clases de permeabilidad al aire, que van del 1 al 4, siendo la CLASE 4 la que ofrece menor permeabilidad (deja pasar menor cantidad de aire). Es necesario encontrar un equilibrio entre las diferentes características técnicas de la ventana, ya que no sirve de nada una ventana con un elevado nivel de aislamiento si tiene filtraciones de aire.
Estanqueidad al agua
Hace referencia a la capacidad que tiene la ventana para impedir el paso del agua a través de ella. Su clasificación va desde la clase 1A hasta la 9A y, a partir de ahí, valores especiales, siendo estos últimos los que ofrecen una mayor estanqueidad. La estanqueidad al agua es un valor importante en la ventana, sobre todo en zonas lluviosas, ya que la entrada de agua en la vivienda puede traer consigo problemas de salud, humedad y moho.
Resistencia al viento
Mide la presión que es capaz de soportar una ventana cerrada. Se clasifica en cinco clases según la norma EN 12210, siendo la Clase 5 la que ofrece mejor resistencia al viento. Una buena resistencia al viento significa que tendremos una ventana más establece y más segura frente a los golpes y las agresiones externas.
Una vez tenemos claras las diferentes características técnicas que influyen en la calidad de la ventana, nos será mucho más fácil escoger la que será mejor para nuestra vivienda.
EFICIENCIA ENERGÉTICA
¿Cuánto ahorran las ventanas Kömmerling?
El PVC gracias a su propiedad de baja conducción térmica es un aislante natural cuyos niveles de aislamiento son superiores a otros materiales y por su puesto a los del aluminio con o sin rotura de puente térmico. La instalación de cancelería de PVC junto con un vidrio adecuado puede suponer un ahorro en el consumo de energía de una vivienda de hasta un 70%.
Balance energético
Incluso solo con un 30% de material reciclado el PVC tiene el mejor balance ecológico con el menor consumo de energía y las emisiones de CO2 más bajas, Ciclo de vida del producto y Reciclaje:
Las ventanas de PVC tienen una vida útil de más de 50 años. Al desecharlas, más del 95% se recicla y reincorpora al proceso productivo. El PVC de ventanas antiguas con perfiles Kömmerling, al igual que el PVC procedente de los restos de producción y de recorte, constituye una materia prima apreciada, equivalente al PVC recién elaborado.
De forma general, consideramos que a menor valor de la transmitancia térmica U (W/m2K), menor es la cantidad de calor que pasa a través de la ventana por unidad de superficie y consecuentemente, mejor aislamiento cuanto menor sea este valor. Igualmente, para la refrigeración, cuanto menor sea g (factor solar), menor será la incidencia de la energía solar, que atraviesa el acristalamiento, reduciendo las necesidades de la demanda de refrigeración, para mantener una temperatura de confort en la vivienda.
La eliminación de puentes térmicos PT y la transmisión de energía (frío y calor) no sólo se da en los elementos generales como paredes o techos, sino también en las esquinas, ejes, juntas, etc, por lo que la instalación de las ventanas y la ventana en sí mismo son elementos fundamentales a la hora de reducir la incidencia de dichos puentes en la valoración energética de la vivienda.
Mediante la aplicación adecuada del aislamiento en una instalación eficiente, la transmitancia térmica lineal es reducida a valores por debajo de 0,01 W/mK, y los PT no deberían sobrepasar el 5% de las pérdidas totales a través de los cerramientos.
Fundamental es la estanqueidad, los posibles orificios en la envolvente del edificio causan un gran número de problemas con los flujos de aire del interior al exterior a través de grietas y huecos, exponiéndonos a un alto riesgo de provocar condensaciones en la construcción. Un edificio eficiente requiere un soporte mecánico, intercambiador de calor, para el suministro continuo de aire proveniente del exterior, se requiere una excelente estanqueidad de la envolvente del edificio.
Colaboración: Kömmerling